jueves, 22 de noviembre de 2007

UN POCO DE CRITICAS Y MEMORIAS.

Y QUIÉN SOY YO?...PERO...

Acabo de cerrar la tapa del último libro ganador del Alfaguara 2007. Mira si yo te querré de Luis Leante, que no se jacta de ser un autor novel, aunque sí que era un perfecto desconocido -literario- hasta que hace algunos meses se alzara con el Premio Alfaguara de Novela 2007. Recuerdo hace ya algunos meses, haber leído y releído implacables criticas, de ánimos exacerbados; menoscabando la calidad o la validez literaria de estos seudo premios. Recuerdo también haber justificado recargadas frases de estos atrayentes fustigadores siempre dispuestos a alzar el dedo acusador y supervisor, de estos catadores de novelas, poemas, ensayos y demás. Me he explicado sus mordaces comentarios, siempre, atañéndolos a ciertas frustraciones que podían haber acometido sus pensamientos. En fin, concluí con esta novela; historia -por cierto- plagada de aventuras con grandes dosis cinematográficas, terminología perezosa e inverosímiles amores. Y ahora puedo notar -sin temor a equivocarme-; que mi extensa capacidad de indignación no esta del todo agotada. Si alguien la ha leído, sabrá porque lo escribo. Si bien es cierto que cada cual tiene el derecho de sacar el mayor beneficio a su talento o de su -como en este caso- insuficiencia de talento; sólo añadiré que en mi desconsolador ranking se sitúa justo por debajo de El código da Vinci. La cual sólo terminé por la morbosa expectativa de saber si lo que hasta ese momento había leído podía ser peor en las siguientes páginas, y asombrosamente siempre lo era. Esta vez, Mario Vargas Llosa fue presidente del jurado calificador, sucedido por otras figuras notables del mundo de las letras como: José Luis Cuerda, Santiago Gamboa, Juan González, Claudia Piñeiro, etc y ahora que lo pienso bien, me pregunto ¿No se habrán propuesto estos obnubilados jurados de turno seguir la arcaica consigna surrealista y desaparecer de una vez por todas con la buena literatura? Si es así, bueno, entonces la cosa cambia.

MEMORIAS DE SHAKESPEARE

Ahora si, vayamos a lo que concierne y es que hace unos días, recluida en mi habitación, sin ánimos de mover un dedo, pude disfrutar de una maratón de películas de época romana: Augusto, Cleopatra, Julio Cesar, Roma, etc, etc, etc. No pude evitar sorprenderme y advertir que siempre con frecuencia confrontamos la obra literaria y cinematográfica que comparten o no un título, para hacerlas partícipes de un mismo ranking, cuando es incuestionable que corresponden a categorías distintas. Esto no quiere decir que como espectadores no nos consideremos desilusionados cuando un personaje al que conocemos al revés y derecho por la literatura queda disminuido a tinieblas en su versión cinematográfica. Y no digamos si es un clásico. En este caso, además la obra ya tendrá sus adaptaciones y dependerá de la habilidad del director, guionista, actores y demás, el suplantar la depreciación que generalmente padece la literatura en la pantalla. Y, cuando hablamos de cine y literatura, ya saben, compete hablar de Shakespeare.
Recuerdo que cuando cayó en mis manos el drama de Shakespeare: Julio Cesar; pensé que correspondió atribuírsele títulos tales como; Bruto, Cayo Bruto, Marco Bruto, Bruto y Casio, pues en este, Shakespeare le dedica a Marco Bruto una de sus más supremas tragedias. Y es que Marco Bruto es el personaje principal de la obra, el decidido héroe que pretende, a pesar del amor que siente por Julio César, restablecerle a Roma la república despojada por el tirano. Julio César; es una historia de intrigas y conspiraciones, y, sobre todo, como siempre en Shakespeare, del poder de autosugestión de la palabra. Lo cierto y fuera de toda divergencia, es que Julio César es una obra política en la que se bosqueja la providencia de Bruto de acabar con César. El scanner psicológico que proyecta -que por cierto, consigue magistralmente Shakespeare-, y logra introducirnos en la mente; la ambigüedad de los pensamientos y concienzudas frases que desequilibran la balanza entre el bien y el mal, entre el amor y la envidia, la fidelidad y la traición. La ambición ni menos, ni más que la del resto; disfrazada en amor a la república romana.

Dos son los personajes que influirán en los acontecimientos: Casio, el tentador de lengua ágil y pensamientos profundos que seduce a Bruto, y Marco Antonio, a quien Bruto, y el resto de implicados, subestiman en cierta forma, permitiéndole hablar en el funeral de Julio César, lo que finalmente es ominoso para ellos y nos brindará el momento más álgido de toda la tragedia. El regicidio de César es -quizá- la parte más afamada de la toda la obra. Dejando de lado los presagios de un adivino, asimismo, las premoniciones de Calpurnia, su esposa; César es sorprendido en el senado por los traidores. Luego de intercambiar algunas palabras, Casca lo apuñala en la nuca, y los otros le secundan en la acción, terminando por Bruto. César balbucea en ese momento: ¿Et tu, Bruté?, lo cual se traduce en ¿Y tú, Bruto? ¿También tú, Bruto? A lo que Shakespeare adiciona: "Entonces caiga, César", indudablemente aludiendo que no quería sobrevivir a tal acto de traición. Tras la muerte del César, Marco Antonio -imprevisiblemente-, excita al pueblo a desterrar a los traidores. Casio y Bruto, prefieren el suicidio antes de verse apresados.
En definitiva, la memoria de Julio Cesar no sería la misma si Shakespeare no se hubiera encargado de ensalzar, sublimar e inmortalizar este imponente personaje de la historia romana. Julio Cesar, personaje insolente a la vista de una telaraña de envidias y traiciones; causante de una frívola conspiración producto de su muerte.
En el último acto César reaparece en escena como espíritu, en un escrupuloso afán de encajar algunos de los tradicionales temas shakesperianos (las apariciones, las predicciones); pero el parlamento de Marco Antonio culmina la obra, que después no hace más que alargarse superfluamente en obediencia de un rigor histórico, que por cierto, Shakespeare desprecia olímpicamente.

Ahora; Julio Cesar protagonizada por Marlon Brando -antiquísima adaptación y la más cercana copia fiel al drama-, como “Marco Antonio” y lo ubico entre comillas porque es de más irónico decir que hasta la soberbia estrella tomo un papel diferente al personaje principal. A lo que compete, Julio Cesar de Mankiewicz -a mi opinión- hizo todo lo que su imaginación le permitió -y no es poco lo que le permitió- para atreverse hacer cine de la obra de un autor en el que todo y siempre está en el esplendor. La película salió así algo jadeante, pero tiene cosas excelentes y un cuadro de actores egregios -menos Louis Calhern, que parece un norteamericano gerente más que un emperador romano-. Sin embargo hay sucesos notables como el discurso de Marco Antonio, que es una pieza magistral del cine al servicio de la palabra. Como también cabe mencionar los olvidos inexcusables como uno de los mejores diálogo que mantiene Cesar y Marco Antonio sobre Casio: “…Ese Casio tiene aire macilento y hambriento: piensa demasiado. Hombres así son peligrosos…Pero no le temo. Sin embargo, si mi nombre estuviese sujeto al temor, no conozco otro hombre al que evitaría tanto como a ese flaco de Casio. Lee mucho, es un gran observador, y penetra bien en las acciones de los hombre…y sonríe de tal modo como si se burlara de sí mismo y despreciara a su espíritu por poderse mover a sonreír de algo. Los hombres como él nunca tienen el ánimo en paz mientras observan a alguno mayor que ellos mismos, y por tanto son muy peligrosos. Te digo lo que hay que temer, más bien que lo que yo temo, pues siempre soy César...”.

En definitiva, desilusionada lo que se es desilusionada no quede ese día, además de señalar que esta veterana película ya había sido auscultada por mi ojos, ya algunos años atrás, pero de tan niña, incapaz de estremecerme y comprender la magnitud de la obra. Y es que, para terminar ahora si, nunca jamás la copia podrá confrontarse con el original.

24 comentarios:

esteban lob dijo...

Estoy impresionado, Gabriela, por la profundidad, convicción y solvencia de tus apreciaciones literaria y cinematográfica.

Afectuosos saludos.

nosotros-somos dijo...

Gabriela eres soberbia, sólida, tu manejo de la historia es muy detallado, trasluces la información en forma detallada y entretenida, tus convicciones son acertadas totalmente y si Vargas Llosa era el presidente del jurado es que seguro se pusieron de acuerdo para que el ganador no los opara a ellos!!!
Abrazos sureños y sonrisas madrileñas!!!

Paz Espera dijo...

Intentamos trabajar la literatura de Blog como un espacio alternativo al que constituye el canon literartio en nuestro pa�s...
(Estamos lejos de Huidobro, Mistral y Neruda...)
Nos interesa tu comentario:
http://letralterna.blogspot.com/

Anónimo dijo...

Perdone usted , que no venga más a menudo a visitar su sorprendente blog, donde se vive literatura de primerisima clase y donde se puede aprender mucho de tan extraordinaria escritora, pero el tiempo para mi es muy limitado necesitaria que los dias se alargasen al menos a cuarenta y ocho horas, y mi edad fuera de solo veinte años, pues tengo tantos proyectos y tan corto es el tiempo que me debe quedar, que muchas veces pensando en ello me dan ganas de llorar. En fin ya no es tiempo de quejas, tuve mis oprtunidades y si no las aproveché, soy tan malo escribiendo y tengo tantas faltas ortográficas, la culpa solo es mia y no debo echarsela nada más que al infortunio de una vida de trabajo y ....bueno no sé por que le explico estas cosas al fin y al cabo casi todo lo que soy y siento está plasmado en las historias que escribo como puedo en mi web www.antoniolarrosa.com Un saludo desde España.

Vincent Vega Jr. dijo...

No he leído al ganador del premio Alfaguara, pero tu comentario despertó mi interés. Lo buscaré.

Gracias por tu post, de despertar llamdos o demases, de eso se trata no?

Saludos santiaguinos

Nico dijo...

Como siempre Gabi, disfruto de leerte es hermoso. Gracias por tus bellas palabras. Shakespeare para mi unos de los mejores escritores en tragedia y tragecomedia (si asi se llama)...

Te dejo un beso grande, y profundamente agradecido de leerte.

Nicolas.

SinTuLatido dijo...

Gracias Gabriela por tu comentario en mi blog.He pasado a visitarte y he estado leyéndote. Tu blog me gustó mucho.Por momentos me identifiqué mucho con tus letras.
Te dejo besos y espero que tengas una linda semana.
Volveré

Anónimo dijo...

No solo tu capacidad de indignación no esta agotada, si no la de muchos lectores que nos sorprendemos año a año por cada una de las entregas de algafuaras, planetas, etc. Sin ir muy lejos, el alfaguara 2006 fue también una notable muestra de incapacidades por mas que el afortunado escritor tenga miles de seguidoras cegadas por sus encantos ja.
Un beso.

Anónimo dijo...

Muy buen blog. Tienes mucha consistencia en tus criticas y textos.
Un abrazo.

Taller de arte dijo...

Sin duda; tu talento habla por sí sólo. Espero poder mandarte el poemario para que me guies.
Te abrazo desde lo más profundo.

Roy Dávatoc.

P.D. Gracias por ser mi amiga, eres una excelente persona.
Abrazos.

Anónimo dijo...

Coincido contigo en el punto claro que una obra y que obra! como Julio Cesar pueda siquiera rozar con la pelicula. No hay punto de comparación, empezando porque el cine es cine. También coincido y con mayor razón e igual indignación con respecto a la premiación de este año, fatal, como todos los últimos años. Quizas tengas mucha razón cuando dices q tienen una clara consigna, desaparecer la buena literatura; indudablemente estamos invadidos por "literatura" comercial carente de todo sentido artistico.

Paz Espera dijo...

Gracias por la visita...quédate en línea:

http://letralterna.blogspot.com/

Has dijo...

Me gustó la forma de criticar a las obras. Si algún día me toca criticar algo de estilo similar, me gustaría hacerlo con esa convicción y fundamentos con que criticaste hoy. La verdad es que soy una persona con poca cultura literaria y lo mismo para el cine, que no vio ni leyó estas obras, pero me convenciste de que tenes razón por como lo dijiste.
Besos

Cristián Arregui Berger dijo...

Me ha gustado mucho tu escritura y los temas que tratas.
¡Los grandes negocios editoriales le están haciendo daño a nuestro futuro! Al menos, nuevas alternativas como los blog sirven para hacer públicas otras escrituras y reflexiones, pero queda mucho por hacer.
¡Sigamos adelante!
Saludos y estamos visitándonos
Cristián

Verito Constanzo dijo...

Te agradezco profundamente que hayas visitado mi "humilde" blog.. que después de leer éste me averguenza un poco.
Gracias por tu comentario!! y me pasa exactamente lo mismo con una escritora Chilena. Las críticas no le faltan y el hecho de vender tantos libros la convierte en una escritora "light" (como impúnemente se le ha denominado). Yo sigo leyéndola y leyéndola porque digan lo que digan. Es la mejor.
Un abrazo desde Chile!!
Te espero en futuras publicaciones. Aquí estaré para leer las tuyas tambien.

@Igna-Nachodenoche dijo...

Gabriela es bien elocuente tu capacidad de adentrarte, tu capacidad de visión y crítica, me agrada.

Besos.

Mar dijo...

Sin palabras otra vez!...
Simplemente maravillosa e impresionante.
Gabriela eres increible...Potente 100%
Tu admiradora
Marcela.

Luli dijo...

GABRIELA: Por favor necesito que dejes tu voz en mi blog y la de todos tus Amigos.

Gracias

O.E.M. 8.8. dijo...

saludos gabriela , la distancia es grande pero los andes llevan neustra voz a donde queramos ...

la CORDILLERA DE LOS ANDES ...

la majestuosidad de nuestros ANDES ,,,


condorcanqui ....

racias por tu visita y si quieres saber algo mas acerca de la rémora de la humanidad te recomiendo


el mercader de venecia de W. Shakespeare ...

el mercader de venecia muestra loq ue es la economia y quienes son los que la manejan ..

saludos desde el macizo COLOMBIANO ... la cordillera de lso andes ...


Tupac Amaruuuuúuuúuuúu

ysraelg7 dijo...

Esto si que estuvo bueno eehh, que tal fuerza para escribir y poder tu posición.

Me encantó.
Un beso.

markín dijo...

Mérito del cine, ser un punto de comparación. Compararse con la literatura, aún sin serla.

No se podría meter todo el texto en dos horas de producción. Es obvio que las representaciones matan el vuelo que tiene nuestra imaginación al leer e interpretar.

Mérito del cine y la tv, que en los niños o incluso en los adultos, pulule en su mente la frase: "también tú, Bruto".

Todas tus apreciaciones son válidas; desde las entregas de premios que por motivos inexplicables caen en quienes quizá no merecen; hasta las posturas de los productores, directores y guionistas que se les antoja, comercialemente, engrandecer a unos y opacar a otros personajes literarios.

No se puede complacer a todos.

Se puede ser objetivo en la interpretación literaria?

qué ópticas se deben tomar en cuenta?

cariños.

chau.

Jorge Atarama dijo...

El ser humano es tan complejo que aveces no sabemos cual es el criterio para juzgar algo y que intereses hay de por medio, lo mejor es disfrutar lo que hay y tratar de verle el lado bueno, o buscar buenas manifestaciones como las de tu pluma y tu blog. Un abrazo desde Lima.

Enrique de Santiago dijo...

Querida amiga, se extrañan sus excelentes entregas, aquí esperamos en las tierras australis
Un abrazo

O.E.M. 8.8. dijo...

DE SHAKESPEARE ....


el mercader de venecia ...