miércoles, 22 de agosto de 2007

ECLIPSE.

Que caída la mañana
Que sombría se revela la tarde
Vacía escucho la música
Y los parpados que caen

Existencia dura

Las hojas que se mecen
De un lado a otro
Vestidas de marchito color
Ignorantes a la belleza
Ignorantes al desamor

Decaídas las sonrisas
Noches eclipsadas
Gritos de esperanza
Mezquinas dosis de alegría

Mezquina vida,
patibularias palabras, miradas
oxigenadas de rencor,
de envidia, de oscuros sentimientos.

De regreso,
Absurdos paisajes
Alas que se elevan cansadas,
envueltas de belleza,
henchidas de dolor.

Existencia moribunda.

Maldito día sombrío,
que envuelves de gris,
que arrebatas la alegría del ayer,
que devuelves la ilusión,
con migajas de inquietud.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

entraste a mi blog y me preguntaste si el relato era sobre el terremoto de peru, no?....siento desilusionarte pero no es asi...estaría bueno que sigas participando del relato..besos

Anónimo dijo...

te dejo la página: http//justicialiteraria.blospot.com

@Igna-Nachodenoche dijo...

La nostálgia y cotididianidad hacen mella.

Precioso texto.
Saludos.